Chispita vivia en un arbol
La que consideró su familia la abandonó en verano en el parque de la Dehesa, en una colonia. La dejó a su suerte sin pararse a pensar en si sus vecinos peludos la considerarían una intrusa. Así fue, no la dejaban comer, la pegaban…. Chispita, gata casera, no supo ganarse la vida ni el respeto y pasaba sus días en aquél árbol, desesperada, bajando a comer las sobras que el resto dejaba.
Una persona la vió y empezó a alimentarla, le hizo un refugio y consiguió que fuera perdiendo el miedo, que dejara ese arbol que tanto la refugió
Un dia de noviembre, una compañera vio a Chispita con su nuevo amigo y decidió ayudar.
La capturó y resultó estar ya esterilizada, la teoría del abandono se hizo más fuerte aún.
Chispita es una gata preciosa, muy agradecida, cariñosa a rabiar, y no guarda recuerdo de aquellos meses horribles en la calle, ni de aquél arbol ni de como el hambre se apoderaba de ella y de su cuerpo, en los huesos. Ahora se siente segura y duerme tranquila.
Es muy sociable, compatible con otros gatos y con perretes.
Chispita espera solo rehacer su vida de nuevo con una familia que la cuide para siempre. Sabe que no dejaremos que vuelva a pasar hambre ni miedo, sabe que haremos lo necesario para que siempre esté segura. Nos ayudas?.
Si quieres acoger o adoptar a Chispita, escribe a: adopciones@gestionfelinamadrid.org
Si no, difunde
Adopta, no compres, y nunca pases de largo