Jack aún tiene miedo del ser humano…no es extraño porque anduvo por las calles con una pata trasera amputada durante un año con infección y el hueso fuera ante la indiferencia y el rechazo de muchos seres de dos patas. Jack sufrió mcho y aún tuvo que pasar por la amputación total de su pata.
Hoy nos deja rozar su hociquillo y come de nuestra mano pero con quienes realmente es feliz es con los gatos que lo rodean. Siempre hospitalario apoya a los recien llegados como un escudero.
disfruta del sol y de la buena vida.
jack un dia tal vez aprenda que encima de una piernas humanas se duerme a pata suelta,mientras necesita cariño comprensión y espacio el te premiará con sus carreras sus juegos con los gatos y su buen comer.
Eres el valiente que necesita Jack?
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