Por no tener no tiene ni nombre…
hay veces en las que las historias de los gatos te golpean en la cara y te quedas sin siquiera ideas para ponerles uno, un nombre nuevo que no reconocerán hasta pasado mucho tiempo,hasta que lo sientan suyo.
La llamaremos por ahora gata carey, hasta que se ilumine algún nombre que nos parezca que le encaja.
La gata carey que habitaba sobre un tejado, sobre el tejado de la que fue su casa,sobre el tejado de la casa de quienes fueron su familia,sobre el tejado de la casa donde la dejaron sola.
Esta es la historia que conocemos de la gata carey.
Ahora nos toca editar y montar para ella una vida nueva,buscar una familia nueva,una seguridad nueva,ahora nos toca hacerla feliz.
La gata carey no es una jovencita, tampoco es una gata vieja, es una gata sola que esperaba sobre un tejado la vuelta de quiénes creía la querían.
La gata carey es cariñosa al máximo y reclama mucho cariño constantemente,tanto como le faltó antes.
La gata carey tiene un caudal inagotable de amor para dar y recibir.
¿ quieres adoptar al AMOR?
adopciones@gestionfelinamadrid.org